Una vivienda justa es una sin discriminación. Significa no ser discriminado cuando renta o compra una casa. También, que todos tienen derecho a vivir en un vecindario o comunidad donde todo tipo de personas sean bienvenidas.
La discriminación en temas de vivienda se presenta de muchas formas y se comete contra personas muy diferentes. La discriminación afecta a todos al limitar dónde podemos vivir y quiénes pueden ser nuestros vecinos.
Discriminación ilegal (motivos prohibidos)
Las leyes de vivienda justa amparan contra discriminación en temas de vivienda. La discriminación es ilegal si el motivo de esta es uno de los indicados en la ley. Si el motivo de esta no es uno de los indicados en la ley, no es ilegal.
Ejemplos:
- “No le rentaré porque es africano”. Discriminación ilegal basada en la raza, color o nacionalidad.
- “No le rentaré porque fuma”. Discriminación no ilegal.
Es ilegal para todos discriminar o acosar a alguien en una vivienda por estos motivos prohibidos:
- Raza
- Color
- Nacionalidad o ascendencia
- Cultura
- Religión
- Discapacidad
- Familias
- Sexo
- Género
- Orientación sexual
- Edad
- Asistencia pública
- Estado civil
- y más
Los arrendadores, agentes de bienes raíces, bancos, vecinos, pueblos y otras personas pueden considerar otras cosas al tomar decisiones sobre la vivienda. Por ejemplo, pueden garantizar que usted pague la vivienda. Un arrendador puede pedir referencias al arrendatario. Pero no puede negarle su vivienda, tener normas diferentes o suponer hechos sobre usted por alguno de los motivos ya indicados.
Por ejemplo:
- Un arrendador no puede suponer que porque usted es soltera no podrá pagar la renta.
- Un arrendador no puede suponer que porque usted tiene una discapacidad no podrá vivir por su cuenta.
- Un pueblo no permite que las personas coloquen adornos de navidad en su casa, pero tampoco permite que otras coloquen adornos para celebrar el ramadán.